31 marzo 2006

Godfrey Reggio - entrevista


Godfrey Reggio es el director de la trilogía Qatsi. Sus documentales describen la realidad, rechazando por completo la ficción y el empleo de actores y decorados.

La trilogía, compuesta por las películas Koyaanisqatsi, Powaqqatsi y Naqoyqatsi, presenta una serie de poéticas y conmovedoras imágenes. El resultado es una recopilación de ensayos visuales y sonoros (la música corre a cargo de Philip Glass), que tratan del impacto destructivo del mundo moderno en el medio ambiente.

¿De dónde procede la idea para la realización de la trilogía? ¿Guarda alguna relación con su trayectoria personal?

Sí, tiene que ver con mi trabajo con bandas callejeras en la frontera con el norte de México. Por aquel entonces yo era monje, por lo que no tenía ningún contacto con los medios de comunicación. Un hermano de la orden me habló de la película Los olvidados (los jóvenes y marginados, los dejados de la mano de Dios). No se trataba de una película amena; me conmovió profundamente. Creo que la habré visto unas 150 veces con los miembros de las bandas. Me hizo reflexionar sobre la capacidad del cine para emocionar a la gente. Buñuel es el gran maestro, pero me motivó para encontrar mi propia voz en el cine.

En sus películas, usted se muestra muy crítico con la tecnología. ¿No le parece contradictorio, pues, emplear la tecnología para manifestar dicha crítica?

¡Por supuesto! ¡Es una contradicción total! Incluyo conscientemente, como una parte integral, aquello que cuestiono. Es como una especie de vacuna: si no quieres coger la fiebre amarilla, debes introducirla en tu cuerpo. Mi objetivo es comunicarme y me comunico a través del poder de las imágenes, que es lo que nos ofrece la tecnología, y lo hago con el propósito de cuestionarla.

¿Dónde cree usted que estaríamos ahora si la tecnología no avanzara con tanta rapidez?

Es difícil de saber. No podemos regresar al pasado. La tecnología no es una simple moda pasajera. No lo sé. Sólo se me ocurre pensar en los países del hemisferio sur, donde la gente no ha experimentado el boom de la tecnología y en su lugar ha desarrollado competencias humanas en comunidades que ahora se hallan en peligro. La tecnología está integrada en nuestras vidas. En este sentido, es el acontecimiento más extraordinario de los últimos siete mil años. Nos ofrece el lenguaje de las imágenes, del nuevo imperio. Y el ignorarla elimina innumerables ideas y planes magníficos: en el momento en que uno se compromete, también interviene la providencia. Ocurren entonces todo tipo de cosas positivas, que de otro modo nunca se habrían producido. Una serie de acontecimientos derivan de esa decisión, poniendo a favor de uno incidentes fortuitos, encuentros y apoyo material, que ningún hombre podría haber soñado con lograr. «Sea cual fuere tu sueño, comiénzalo. La audacia tiene genio, poder y magia.»

Todo el mundo sabe que el 50% de una presentación audiovisual está compuesto de imágenes, mientras que el otro 50% está formado por audio: música o palabras. Si tuviera que añadir palabras a su película, ¿qué lenguaje escogería? ¿En qué idioma estarían los subtítulos?

En realidad ya hice esa elección. Elegí el medio de la música, porque permite establecer una comunicación directa con el alma del oyente. Busqué una composición original que fuera capaz de comunicarse directamente con los sentimientos de la gente. Si deseo comunicar un significado, utilizo las palabras; si deseo comunicar sentimientos, utilizo el arte. Por lo tanto, en mis películas, la música tiene el mismo valor que las imágenes.

¿Por qué eligió al compositor Philip Glass para la banda sonora?

Cuando escuché a Philip Glass, fue como una revelación y me dije: «ésa es la persona con la que quiero trabajar». Tenía la sensación de que su música era muy cinemática. Presenta una estructura polirrítmica y, además, procede de la tradición hindú, muy semejante a un jazz progresivo. Su música no es espontánea, sino que es una nota ascendente que nunca llega a lo más alto, siempre subiendo.

El director cinematográfico Peter Greenaway, que también ha trabajado con Philip Glass, observa que durante cien años hemos estado realizando películas que no son más que literatura ilustrada y que deberíamos buscar un nuevo lenguaje: «películas hechas de ideas, no de anécdotas o argumentos». ¿Qué opina usted al respecto?

Estoy de acuerdo. Ello no significa que los argumentos no sean interesantes, ni que una película deba ceñirse al formato teatral del escenario. En mis filmes elimino dicha caracterización y me quedo con el fondo para luego convertirlo en el primer plano.

¿Cuál es el proceso de documentación antes de rodar una película? ¿Utiliza imágenes de archivo o filma las imágenes in situ para la película en cuestión?

En el caso de las dos primeras películas se trata fundamentalmente de fotografías originales. En el caso de Naqoyqatsi, distorsiono las imágenes mediante la tecnología, por lo que considero que esta última película está integrada por completo por fotografías originales, aunque el 80% de las imágenes procedan de archivo. No utilicé ninguna de las imágenes tal y como me llegaban; sólo las utilicé después de haberlas manipulado.

¿Podría decirme de qué trata su nuevo proyecto?

El título provisional es Savage Eden (Edén salvaje). Edén, por supuesto, es el Dios del Paraíso, según la referencia bíblica, y el tema es el «ismo». Lo que plantea la película es que la desaparición del fundamento físico y metafísico de la vida nos conduce a la ideología, al destino, al control del comportamiento humano a través del fascismo utópico; habla de cuando lo perfecto se convierte en el enemigo de lo bueno. Por lo tanto, esta película cuestiona la perfección del «ismo» de la ideología.



Extractado de:
www.barcelona2004.org/esp/actualidad/entrevistas

1 comentario:

Diego dijo...

Hola, hace poco menos de una semana vi Powaqqatsi, me intereso muchisimo la presentacion del documental y tengo que decir que hacia mucho tiempo que no habia visto imagenes de un poder tan grande como la del documental, soy estudiante de fotografia, por lo que me impacto aun mas el trabajo fotografico del film, creo que la trilogia qatsi llega para romper con el paradigma documental con el que nos criamos, excelente, lo interesante es que de cada una de las peliculas los comentarios se podrian alargar por siempre, bueno eso seria.

saludos

Diego Jaña